Cómo entrenar a un caballo para hacer rutas ecuestres por la naturaleza
En este artículo te abrimos las puertas de Anima Equi para contarte cómo es el entrenamiento, el carácter y la preparación de nuestros caballos destinados al turismo ecuestre.

Los caballos son el corazón de Anima Equi y parte de nuestra familia. Actualmente, nuestra manada está formada por diecisiete ejemplares de pura raza española (PRE) y cruzados. Durante el año, todos ellos viven en prados abiertos en estado de semilibertad y, por eso, están acostumbrados al terreno exigente que caracteriza al Pirineo aragonés: son seguros, fiables y resistentes, capaces de cruzar ríos y sortear senderos complicados con facilidad.
Entrenados con mimo, respeto y técnica, nuestros caballos son amistosos y están preparados para acompañarte en rutas de montaña, paseos ecuestres o sesiones de formación, tanto si te estás iniciando en la equitación como si tienes experiencia como jinete. En este artículo, te abrimos las puertas de nuestra casa para contarte cómo es el entrenamiento, el carácter y la preparación de nuestros caballos.
¿Qué hace especial a un caballo de turismo ecuestre?
La doma de un caballo destinado al turismo ecuestre de montaña va más allá de las bases de la equitación. No buscamos únicamente que responda a los tres aires, sino que adquiera autonomía, equilibrio emocional y confianza para enfrentarse con serenidad a situaciones reales del exterior. Un caballo que guiará a familias, niños, grupos de amigos o personas en paseos y rutas ecuestres por alta montaña.
Nuestros caballos están preparados para rutas largas, con desniveles, cruces de ríos, encuentros con fauna y todo tipo de sorpresas. Esto requiere una preparación específica, tanto física como mental. Por eso, en Anima Equi trabajamos con un enfoque progresivo, basado en el respeto al ritmo del animal y en el aprendizaje a través del ejemplo, especialmente en los primeros meses.
Doma básica y aprendizaje por observación
En la primera fase, enseñamos al caballo a responder a los aires básicos: paso, trote y galope. Pero pronto pasamos a trabajar un paso activo, para ayudarle a elegir el mejor paso en los tramos difíciles de nuestras rutas ecuestres de aventura. Para ello, cuando empezamos a domarlo al principio le indicamos el mejor trazado y, poco a poco, vamos invitando al caballo a que elija por sí mismo. Para ello, lo entrenamos junto a otro caballo con mucha experiencia que lee muestra cómo avanzar de forma segura y con el menor esfuerzo. Así, aprende por observación.
Por otro lado, fomentamos que el caballo mantenga siempre un galope cadenciado, sin alterarse por la presencia de otros equinos. Les educamos para ser animales tranquilos, que disfruten del campo y respondan a una conducción suave. El caballo tiene que poder ir con el cuello alargado a un ritmo constante y activo con las riendas largas.

Caballos que colaboran
En el turismo ecuestre por la montaña, a menudo necesitamos una mano libre para consultar un mapa, abrir una cancela o llevar un caballo de reata. Por eso, en Anima Equi entrenamos a nuestros caballos para que se habitúen a que su jinete monte con las dos riendas en una sola mano. También trabajamos el pie a tierra, es decir, acostumbramos al caballo a respetar al jinete o amazona cuando camine a su lado y a sortear posibles obstáculos.
En las rutas por alta montaña, es normal encontrarnos con tramos muy complicados, por ejemplo, un gran desnivel en el terreno o un obstáculo de gran tamaño (como un árbol caído que es imposible rodear), en los que es necesario desmontar y continuar a pie. El caballo debe estar entrenado previamente para respetar la distancia, obedecer indicaciones y mantener la calma.
Confianza y seguridad en cualquier entorno
Es conveniente acostumbrar al caballo a tener una cuerda entre las extremidades sin dar tirones, ya que tendremos que atarlo en circunstancias muy diferentes: ramas, vallas, postes, etc. El ramal debe ser largo, para que el equino pueda comer y recuperar energías. Cuando lo atemos para una pernoctación en exterior, podemos utilizar una cuerda de unos ocho metros, recubierta de manguera con un piquete giratorio.
Un caballo de exterior debe poder ser montado por ambos lados (no solo el izquierdo), ya que con frecuencia el terreno en alta montaña, un precipicio o desnivel, puede hacer que sea complicado subir por la izquierda. Por eso, el hecho de poder montar por la derecha supone un plus de seguridad y flexibilidad para el jinete.
Caballos familiarizados con la naturaleza y las personas
La desensibilización progresiva es fundamental. Entrenamos a nuestros caballos para que se acostumbren a situaciones habituales que se dan en el exterior: la circulación de vehículos y maquinaria agrícola; cruzar puentes, ríos caudalosos o pequeños arroyos, encuentros con perros, así como a subir o bajar de remolques, camiones e incluso barcos. También los habituamos a que sus jinetes abran o cierren cancelas montados y a que se dejen herrar en el exterior sin dificultad.
A veces ocurre que un caballo pierde una herradura durante una ruta por la montaña: en esas situaciones, el guía de turismo ecuestre debe poder realizar un herraje de emergencia. Por último y no menos importante: los caballos de exterior deben ser sociables, tanto con los humanos como con otros caballos. Por eso, en Anima Equi les enseñamos a trabajar en paralelo con otros equinos, sin agresividad y sin estrés. Su bienestar emocional es clave para ofrecer rutas a caballo guiadas, tranquilas y agradables.
Preparados para el turismo ecuestre
En Anima Equi no solo te ofrecemos rutas o paseos por la naturaleza, también ofrecemos formación ecuestre profesional y experiencias de inmersión en el mundo del caballo. Organizamos cursos de equitación, talleres de aproximación al caballo para todos los públicos y actividades con ponis para los más pequeños de la casa. Nuestros caballos están listos para acompañarte en rutas de uno o varios días. Disponemos de rutas a caballo para principiantes, ideales para quienes se acercan por primera vez a esta experiencia.
Pero, sobre todo, ofrecemos rutas a caballo para jinetes con experiencia que quieran vivir una aventura única en el extraordinario marco natural del Valle de Benasque, con el acompañamiento de un guía profesional. En Anima Equi, nuestros caballos no son solo animales bien entrenados: son compañeros de viaje, maestros de naturaleza, guías silenciosos en el monte y miembros de nuestra gran familia. Con ellos, cada ruta es diferente, cada paseo es una historia y cada curso es una puerta abierta al aprendizaje.